La enfermedad COVID-19 está causada por un nuevo coronavirus que ha sido denominado SARS-CoV-2. 

Los coronavirus pertenecen a la familia de virus de ARN (ácido ribonucleico) y su denominación se debe a que la partícula viral muestra una característica corona de proteínas espiculares alrededor de la envoltura lipídica. 

Esta envoltura hace que sean relativamente sensibles a la desecación, al calor y a los detergentes alcohólicos o desinfectantes que disuelven los lípidos e inactivan al virus.La principal vía de contagio de COVID-19 es por contacto estrecho con las secreciones respiratorias que se generan con la tos o el estornudo de una persona enferma. Estas secreciones infectarían a otra persona si entran en contacto con sus mucosas de la nariz, ojos o boca. Estas gotículas que contienen el virus pueden depositarse en las superficies de los enseres y espacios habitados.

Además de las medidas generales de protección personal, debemos desinfectar las superficies y enseres de las instalaciones de uso público (comercios, hoteles, restaurantes, centros deportivos, peluquerías, centros comerciales, clínicas dentales, etc.) que pudieran ser susceptibles de contaminación por coronavirus.

El ICTE ha desarrollado unas guías sectoriales donde se incluyen las medidas generales preventivas para la reducción de contagios por SARS-CoV-2 pero en aquellos casos en los que se ha producido un caso de coronavirus o se desee asegurar que la carga viral de la instalación no implica riesgo para la salud, podemos solicitar una desinfección profesional.

Las desinfecciones profesionales frente a SARS-CoV-2 son aquellas que son efectuadas con desinfectantes que tienen eficacia demostrada frente a virus (ver listado de productos virucidas autorizados en España ) y, según la Orden 3269/2006, sólo pueden ser realizadas por empresas que están inscritas en el Registro Oficial de Establecimientos y Servicios Biocidas (ROESB).

Sólo las empresas que demuestran tener personal técnico cualificado conforme a la formación estipulada en el Real Decreto 830/2010, utilizan productos autorizados por el Ministerio de Sanidad y disponen de procedimientos y equipos adecuados, consiguen la inscripción en el ROESB.

1. Sólo las empresas inscritas en el ROESB pueden prestar servicios de desinfección a terceros; en el siguiente enlace http://www.anecpla.com/empresas-anecpla dispones de una relación de más de 500 empresas inscritas en el ROESB con las que puedes contactar.
   
   ¡Sólo estas empresas pueden emitir un Certificado Oficial de desinfección reconocido por la Autoridad Sanitaria!
   
   Cuando recibas una oferta para realizar una desinfección, solicita a la empresa su inscripción en el ROESB.
   
   Durante el estado de alarma, con carácter excepcional, también podrán realizar desinfecciones especializadas lasUnidades NBQ de las Fuerzas Armadas y la Unidad Militar de Emergencias
   
   
2. Sólo tienen eficacia demostrada frente al virus los productos que están incluídos en el listado del Ministerio de Sanidad (ver listado)
   
   El resto de los productos o sistemas (ozono, UV, arcos de nebulización, óxido de cloro, agua ionizada, etc.) o bien no han demostrado su eficacia contra el virus o su comercialización está prohibida. 
   
   El uso de productos no evaluados o no autorizados, además de dar una falsa seguridad de protección contra el virus, pueden causar daños para la salud (riesgos respiratorios, daños oculares y dermales, etc.).